Rememorar los 40 años de democracia es valorar la figura de Raúl Ricardo Alfonsín, todo un símbolo y un honor, ya que fue el mejor estadista que tuvo en el último tiempo la Argentina, “que permitió de alguna manera que respiráramos los aires de la democracia después de tantas noches oscuras que tuvo el país”, así lo destaco el dirigente y actual Secretario de Energía, Mario Pizarro durante una entrevista con Panorama Jujeño.

En ese contexto, puntualizo que las actividades realizadas en homenaje estuvieron atravesadas por la memoria del primer presidente constitucional, desde la recuperación institucional de 1983, Raúl Alfonsín y su enorme legado político, su titánica tarea de restablecimiento de las instituciones y el reconocimiento de derechos.

 “Entendiendo que 40 años de aquel acontecimiento histórico, debemos celebrar la salida de la dictadura instaurada en 1976, que dejó un país plagado de desencuentros, violencia y violaciones masivas a los derechos humanos. Raúl Alfonsín tuvo un rol fundamental en la recuperación de la democracia que permitió restablecer las libertades, la vigencia del estado de derecho y avanzar en la construcción de un país mejor para todos los argentinos”, agregó Pizarro.

 “Hemos avanzado en muchas materias, pero también hemos retrocedido en otras, por eso entendemos que es un deber del radicalismo, de los partidos democráticos y de la sociedad en conjunto, reflexionar en estos 40 años de democracia sobre las tareas inconclusas”, subrayó.

 Recordó también el rol cumplido por el radicalismo en la provincia de Jujuy, donde asumió posturas férreas de defensa del patrimonio público, en particular en la década neoliberal que produjo privatizaciones que tuvieron un enorme costo social. El radicalismo acompañó los reclamos y se opuso a las privatizaciones de la Dirección de Energía, Altos Hornos Zapla, la transferencia a la Nación de la caja jubilatoria provincial y  defendió el salario de los trabajadores estatales. Pero por sobre todo, hemos sido el partido que defendió siempre y en cada momento, aún en las crisis institucionales que soportó Jujuy, la defensa de las instituciones”.

Finalmente Mario Pizarro expresó que “esta democracia que nos dejó Alfonsín tiene como base fundamental la libertad y la igualdad, dos bienes que debemos proteger y garantizar para todos los argentinos, en contextos donde se ciernen  amenazas a la promesa democrática de libertad e igualdad”, concluyó.